Humanismo antropocéntrico
(comp. de antropo-, del gr. ánthropos, hombre y -céntrico que indica cual sea el interés y el campo de referencia, cfr. gr. kéntron, centro). Se considera a la postura que se basa en la ubicación central del ser humano excluyendo, en general, todo planteamiento teísta. Por otra parte, el h.a. rechaza el dominio de un ser humano por otro, desplazando su acción hacia el control de la naturaleza, definida como el medio sobre el cual se debe ejercer un poder irrestricto. Las diferencias con el Nuevo Humanismo están dadas porque éste parte de la posición central del ser humano, pero no descarta a las posturas teístas. Por otra parte, considera a la naturaleza no como un medio pasivo sino como fuerza actuante en interacción con el fenómeno humano. Por consiguiente, el impulso por las mejoras individuales y sociales debe tener en cuenta el impacto humano sobre la naturaleza, cosa que impone limitaciones no solamente morales, sino que debe reflejarse en el sistema legal y en la planificación ecológica.