Paternalismo
(der. de paternal, del ingl. paternalism; cfr. lat. pater). Doctrina que considera a los empresarios y a los asalariados como socios de la misma empresa y recomienda toda una serie de medidas administrativas, sociales, económicas, técnicas, culturales, psicológicas, etc., para garantizar la "paz social" y presentar a la patronal como único garante de esta paz.
Especial atención entre estas medidas se presta a la participación de los asalariados en las utilidades de la empresa por medio de la distribución de acciones minoritarias entre ellos a base de algunas condiciones específicas. Otra medida importante consiste en la recapacitación sistemática gratuita del personal para elevar la productividad del trabajo y la calidad de las mercancías e incrementar así la competitividad de la empresa en el mercado.
El '''Nuevo Humanismo''' critica el enfoque unilateral de esta doctrina y su egoísmo de clase, desde las posiciones del solidarismo, que ve en todos los actores sociales su calidad humana con derechos iguales y deberes correspondientes (Propiedad del trabajador).
Los asalariados tienen el derecho de participar efectivamente en la gestión de su empresa y controlar su actividad, en los marcos de su competencia, además de la participación en sus utilidades. Los asalariados, al igual que los empresarios, tienen derecho a organizarse libremente y defender sus intereses. Por esto el N.H. rechaza la doctrina y práctica del p. como una variedad de la discriminación social, aunque admite algunos procedimientos concretos tendientes al logro del pacto social entre los empresarios, los asalariados y el estado, con la observancia de las normas internacionales.